lunes, 22 de junio de 2009

La Tercera Fuerza

La Tercera Fuerza

            Cada día la sociedad civil cobra más importancia en la gobernabilidad del mundo. Organizaciones no gubernamentales (ONG’s), asociaciones civiles y coaliciones de ciudadanos se están organizando de mejor manera para participar efectivamente en las decisiones de sus comunidades. Esta realidad permite reducir significativamente los abusos de las personas en el poder y disminuir los niveles de corrupción, flagelos estos en buena parte responsables de la pobreza y la exclusión social que vive el mundo menos desarrollado.

            Toda sociedad necesita una conciencia que represente los intereses de la población de la forma más amplia. Una sociedad civil activa permite detener a aquellos proyectos que atentan contra el bien común y que los gobiernos, por razones hay veces oscuras, prefieren ignorar. A través de la historia, el activismo civil ha permitido detener violaciones de derechos humanos y proyectos destructores de ecosistemas.

            Por ejemplo, grupos civiles lograron llevar el caso de Augusto Pinochet a las cortes legales por violaciones a los derechos humanos durante su dictadura en Chile. En 1997, gracias a organizaciones no gubernamentales,122 países firmaron un tratado para prohibir el uso minas anti personales, a pesar de las objeciones de muchos gobiernos poderosos. La empresa Nike vio fuertemente afectado su balance financiero cuando se le acusó de violar derechos laborales en sus fábricas localizadas en países pobres.

            Un extraordinario ejemplo de un grupo civil activo en Colombia es la Red Juvenil e Infantil de Protectores de Derechos Humanos de Ciudad Bolívar en Bogotá. Utilizando argumentos serios y protesta pacífica, lograron que el Plan de Desarrollo del Distrito incluyera ocho colegios nuevos para su localidad, además de desayuno y almuerzo para los estudiantes. Los análisis de la red habían demostrado deserción escolar por física hambre.

            En materia de seguridad, este grupo de jóvenes también logró que la administración del Distrito de Bogotá volteara su mirada hacia la localidad. Los crímenes se redujeron a más de la mitad y la ‘recogida de jóvenes’ en fines de semana cayó 85%. Como si esto fuera poco, este grupo de ciudadanos logró que bachilleres de Ciudad Bolívar continuaran sus estudios gracias al apoyo de la CUN – Corporación Unificada Nacional de Educación Superior (Diario El Tiempo, Caballeros y Damas de Ciudad Bolívar, Junio 14 de 2009).

            El poder se manifiesta diferente manera en cada uno de los tres actores principales de la sociedad. Los gobiernos tienen poder gracias a sus fuerzas armadas y la policía. En muchos países se abusa de este poder. En Colombia, los falsos positivos son un ejemplo de esto.  El otro actor importante, la empresa privada, tiene mucho dinero, el cual utiliza para influenciar a gobiernos a través de contribuciones políticas y hasta sobornos, en algunos casos. La sociedad civil no cuenta con poder militar ni económico, solo cuenta con personas valientes que no aceptan injusticias, atropellos ni desigualdades.

Lo  más interesante de todo es que los vientos están favoreciendo a la fuerza ciudadana. Tecnologías como Internet, blogs, YouTube, Facebook y mensajería de texto vía celulares, permiten que la gente se comunique horizontalmente, se movilice políticamente y critiquen a sus líderes duramente sin que estos puedan ejercer los controles de antes. En días de elecciones, por ejemplo, observadores con celulares pueden fácilmente grabar la compra de votos por parte de los corruptos.            

            Las democracias funcionan mejor cuando hay control cruzado. Una sociedad civil en movimiento es clave para defender a la ciudadanía de la corrupción y de los abusos de poder. El trabajo ciudadano debe ser ejemplarmente ordenado, serio, responsable, técnico y perseverante, porque su poder no emana de la fuerza ni del dinero, sino de la información, la moral y la decencia.

            Gracias a los avances tecnológicos, la tercera fuerza tiene el viento a su favor. Es una nueva esperanza para asegurar gobiernos más limpios y transparentes, y sociedades más justas e incluyentes. 

1 comentario:

Anónimo dijo...

Felicitaciones Samuel por empezar a posicionar el tema del tercer sector en el país.

Este sector es clave no sólo para la gobernanza y la inclusión en el desarrollo sino un aliado estratégico de las empresas afin de lograr un buen retorno social de la inversión que realicen a la luz de una gestión socialmente responsable.

Reciba mis felicitaciones por su interés en este tercer sector de lo publico no estatal o privado sin animo de lucro y su importante liderazgo en la comunidad empresarial.

Ojala algún día podamos conocernos e intercambiar alrededor de este tema,

saludo cordial y sincero,


Adriana Ruiz-Restrepo
adriruiz@civisol.org